domingo, janeiro 09, 2005

La amistad

¿Qué podríamos decir sobre la amistad? ¿Qué hace con que una persona no consiga vivir sola y necesite siempre de un compañero al su lado? Hay muchas preguntas y pocas respuestas para eso. Primeramente, podemos distinguir los factores que hacen con que la posibilidad del hombre ser solitario en la tierra sea imposible. El primero factor es el biológico. Veamos el nacimiento de los niños. Nada puede ser más traumático que salir del cuerpo de las madres. Un sitio caliente y protegido donde el niño permanece siempre oyendo los batimentos del corazón de su mamá con todo la certeza que aquello nunca va a modificarse. No hay la luz ni el viento helado para incomodarle. Todo es tranquilo y sosegado. Pero, de repente, todo se cambia. Del cielo al infierno. Primero les hacen llorar de cabeza para bajo. Después les ponen lejos de sus madres aun sucios. Todo es frío y ruidoso. Enseguida, les enrolan en paños donde se quedan inmóviles y, solamente después de todo ese sufrimiento, retornan para su mamá. Por la primera vez en la vida, los niños las ven “de otro lado” y, instintivamente, van a matar su hambre con mucha leche.
Sin embargo, ¿lo qué hay entre eso y la amistad? Todo. Hay siempre en el hombre la precisión de otro. De alguien que le proteja, que le ponga lo que comer y beber. Y ese es el factor psicológico da cuestión. Nacemos desprotegidos y si nos quedásemos solos, moriríamos muy temprano. Primero pedimos por la madre, después por el padre. Fuimos hechos de una manera para que seamos criados por los dos sexos. Aprendemos con las madres como portarse con las mujeres. Percibiendo su sensibilidad, su delicadeza y hasta su sexto sentido. Nuestras madres son las maestras de las próximas mujeres que han de aparecer en nuestras vidas. Y, para los freudianos, los hombres aunque digan lo contrario, procuran en sus mujeres una madre protectora. Una secunda mamacita que continúe a hacer todo lo que era hecho dentro de su casa. Que haga su comida, lave sus ropas y limpie sus orejas. Y las mujeres quieren lo mismo. Desean un hombre que sea su secundo padre. Que les protejan, les dé cariño y que les abastezcan con muchos regalitos. Aunque todas las reglas tengan sus excepciones, la propia excepción se convierte en una regla. Las personas que no son así... Sin embargo, digamos que se encuadran en un tipo bien diferente.
No obstante, la familia no es la única forma de amistad que hay en la sociedad. En los días de hoy, los padres tienen la costumbre de poner sus hijos en la escuela luego cuando ellos más precisan de la atención para su creación. Es hasta los cinco o seis años que los niños más requieren de una educación moral fija para que se tornen personas de buena virtud. Todavía, algunas veces acaban sendo criados y educados por maestras, que ni siempre están preparadas para eso, y muchas veces se tornan niños rebeldes. La ambigüedad es que más adelante los padres no saben en quién poner la culpa de la deficiente educación de sus hijitos queridos. Y si él no tuvo hermanos, es en la escuela que los niños conocen sus primeros amigos.
Es de todos esos problemas puestos que se empiezan los afectos mayores de amistad. El niño tiene la necesitad del cambio de experiencia. Es joven y su cuerpo pasa por cambios increíbles. Hay la urgencia do otro que esteba pasando por las mismas circunstancias. Hay siempre en esta edad o dicho “mejor amigo”. Aquellas personas que tienen el pensamiento muy similar y que se dan muy bien y se quedan muy unidas, hacen todo casi todo juntos. Por medio de juegos y peleas, muchas veces vistos como “violentos” por los padres, pero de real necesitad para el fortalecimiento del organismo contra enfermedades futuras, hay la formación de la persona por cambios de experiencia con los otros que hacen parte de su cotidiano.
Alguien con quién se pueda dialogar, con quién se pueda brincar. Otra persona con el cuerpo igual al suyo, con las mismas necesidades, con las mismas dudas. Sea un amigo o un hermano, el niño habrá que tener un colega para sus aventuras. Sea aquí, sea en la luna. Como “cowboy” o navegante espacial. Que le guste tanto de jugar fútbol, cuando de seducir las niñas. Y es ahí que comienza otro tipo de amistad. El amor, la forma más perfecta de amistad.
Muchos filósofos y pensadores, desde el inicio de los tiempos intentan procuran lo real sentido de la vida. De donde venimos y para donde vamos son las preguntas que más perturbaran sus mentes desde el nacimiento de la filosofía. Sin embargo, la pregunta que también los dejaran noches sin descansar fue ¿cuál seria el sentido de la vida? Y pocos fueron los que tuvieran éxito. Entre ellos, Epicuro fue lo más sabio. Para él, la vida plena es la felicitad, su real sentido. Y esa felicitad no está en el dinero o en el poder. Está en vivir la vida solamente con nuestras reales necesidades. Vivir la vida como su principal dicho, “que soñemos en vivir la vida de la forma más virtuosa posible, pero que esos sueños sean posibles, no tengáis esperanzas, viváis el presente y deje el futuro para mañana.”. Tener amigos, lo que comer y beber bastaba para él. Él hasta vivió con una aceituna por día por cuarenta anos. Y había otra cosa que Epicuro valorizaba muchísimo en su filosofía, la amistad que se convierte el amor. Para él, ningún otro tipo de relación podría ser tan perfecto cuanto ese. Primeramente se comprendía la persona hasta el fundo de su alma. Después de eso, el amante tendría que conseguir conciliar la amistad del apego, de la costumbre de tener siempre el amado cerca de él a la toda hora.
Posteriormente a ese hecho, se empezaba el amor cortes (o amor servil como era conocido en la Edad Media) que es el endiosamiento del amado por el amante. Todo el galanteo se resumía al amante hacerse del esclavo al amado. Darle regalos, elogios y siempre acordarle lo cuando es amado son unos de los escalones para a conquista de su corazón. Y solamente después de todo eso, las almas podrían unirse. Como Epicuro era griego y en la Grecia clásica las mujeres eran vistas como seres inferiores pues no tenían alma, la unión de los hombres eran hechos con la finalidad de adquirir conocimiento. Primeramente pedagógico, después filosófico. Una curiosidad es que ese conocimiento no era solamente pasado por ensañamientos orales. El esperma del maestro servia de conducción para el saber de su discípulo.
Resumiendo, la amistad es la imposibilitad del hombre vivir solo. La urgencia de pasar y aprender conocimiento. La voluntad de transferir para frente sus genes. Es dar al mundo frutos de su amor, tornándose inmortal. Es encontrar su amor, tornarse uno con él. Es hacer del próximo extensión de sí. Es la continua transmisión inmediata de informaciones en un mundo que se torna cada vez mayor. Sea en la Grecia clásica, sea hoy, la amistad siempre es algo que pertenece a la naturaleza humana.

Thiago


3 comentários:

Nanda disse...

Mesmo não 'hablando' nada, portanto entendendo e nterpretando na medida do possível... concordo, concordo! (ainda bem que não sou eu a nova contratação do Real Madri! rs)

Thiago Braga disse...

Muitas coisas não precisam ser entendidas para serem compreendidas. Ainda bem que você gostou, é bom saber que há sempre alguém que lê nossas loucuras...
Té já

Thiago Braga disse...

Pois é Ritinha, tô estudando sim... Você sabia, estudo lendo os livros em espanhol. Agora estou lendo "El guerrilleiro Che" sobre o Guevara, todo em espanhol. Já leu o livro? Quando você quiser, tenho outro. Estou meio descrente com o CNA. Falei com a professora por telefone, não me pareceu um espanhol tãooooo bom (sem falar que ela é brasileira, sei não), mas vamos lá sim.